Benicàssim

Diez de la mañana en el aeropuerto
Tú me mirabas y yo quedaba perplejo
Hablabas de la noche, de los días aquellos
Aquellos días donde todo no era en serio
No quiero escuchar más lo que se ha dicho
No quiero que lo mío se vea entredicho
Que mis rimas se pierden en el abismo
No jures amor eterno si te vas a Madrid
No jures amor eterno y mucho mnos frenesí
No jures amor terno, si vas a Benicàssim
En los brazos de un huevón, llorando por mi
Yo conozco tu cintura y dimensiones
Tú conoces mis pensamientos y emociones
No es dicha, no
Cómo me castiga verte
Escucharte: «mírame a los ojos»
Cuánto conozco, la forma en que te pierdes
Como loca en ti
No jures amor eterno si te vas a Madrid
No jures amor eterno y mucho menos frenesí
No jures amor eterno, si vas a Benicàssim
En los brazos de un huevón, llorando por mí
Llorando por mí